Siglo XIV dC
Gimigliano es un pueblo próspero situado entre las verdes colinas de la pre-Sila en Calabria, a pocas millas de Catanzaro: su nacimiento está fechado siglo IX dC, pero los rastros de la presencia de grupos rurales organizados en esta área se puede remontar desde la época romana cuya demostración son las tumbas romanas descubiertas en el territorio de Gimigliano hace algunos años.
Sus habitantes, desde el inicio y durante los siglos, se dedican al cultivo en terrazas y valles surcados por ríos y cría en la naturaleza salvaje de todo tipo de animales; además de la extracción del preciado mármol verde y rosa de las canteras de la zona hecha Gimigliano estaba famoso en el mundo. Los intereses económicos en el país atraen mucha población desde los orígenes de la antigua aldea, un hecho atestiguado por las numerosas congregaciones religiosas que se establecieron en el territorio, lo que lleva el fervor cultural y religiosa en el país; en este contexto tan vivo desde un punto de vista comercial, religiosa, social y financiera, tenemos evidencia clara en el Gimigliano Crónicas de dos de las familias más antiguas y reportadas, Trapasso y Benincasa.
Estos seres tienen fuertes raíces locales demostrado por el hecho de que la noticia de algunos de los clérigos más relevantes de estas familias se derivan de los Regesti Vaticani de el Russo ya en el siglo XVII; en la siguiente, el XVIII, en Catasto Onciario del Reino de Nápoles, estos dos apellidos ilustres llenan muchas de las páginas de la antigua Archive, con nobles figuras de la aldea, una señal tangible de su expansión en tierras alrededor Gimigliano y en toda Calabria. Las familias en las que se centran en este libro vivir grandes zonas agrícolas propios, dedicando tiempo y recursos para el cultivo, la producción y venta de olio de oliva, una tradición transmitida de generación en generación. Algunos de los más valiosos de estas familias emergen de sus responsabilidades religiosas influyentes y cargos política local y algunos de ellos para las habilidades artísticas, la poesía, en particular, todos ellos aportando su contribución activa al desarrollo y crecimiento de la aldea.
Volver largo de los siglos, los árboles genealógicos de estas dos familias son reconstruidos: las dos familias en el siglo pasado están unidos por el matrimonio de dos de sus componentes. Desde entonces las dos familias se convierten en una entidad grande,con la fusión de sus energías, fuerzas, capacidades y habilidades.
Documentos, fotos de hombres y mujeres pertenecientes a estas familias, las imágenes de los lugares donde vivían, son donados a la visión de los lectores a través de «Trapasso e Benincasa. Due famiglie gimiglianesi«.
